"Debido a que todos los cambios de reglamentación acarrean zonas oscuras", aclara el presidente de Ferrari en una carta dirigida a los aficionados.
"Por eso, el primer objetivo es la fiabilidad, como hemos visto claramente en las sesiones de pruebas. Todos (los equipos) tienen problemas. Nosotros hemos detectado los nuestros y estamos en el proceso de solucionarlos. También estamos poniendo en práctica un intenso plan de desarrollo basado en los datos obtenidos en el túnel del viento y confirmados al compararlos con las pruebas en pista, algo que no sucedió los últimos años. Será un campeonato difícil de seguir para los espectadores, pues los pilotos deberán tener mucho cuidado con los neumáticos y tendrán que ahorrar combustible. Ya he dicho que espero que (los pilotos) no se conviertan en taxistas, aunque es obvio que tienen un trabajo distinto. Me encanta una Fórmula 1 extrema en la que la tecnología y los pilotos estén siempre al límite".
Montezemolo confía en que la FIA esté vigilante debido a los numerosos cambios en la reglamentación: "Debido a que todos los cambios de reglamentación acarrean zonas oscuras, como el combustible, el software, el consumo... espero, y estoy seguro de que así será, que la FIA esté vigilante para evitar las trampas. Ya ha sucedido en el pasado más reciente y no debe repetirse nunca más por el bien de este deporte. He pedido el máximo compromiso a (Stefano) Domenicali y a su equipo, y sé que lo harán lo mejor que puedan. Tenemos un equipo fuerte, la mejor pareja de pilotos, que son experimentados y talentosos, y todos saben lo que tienen que hacer. Podemos contar con un importante factor que sólo nosotros tenemos: el enorme afecto de nuestros aficionados en todo el mundo. Os pido vuestro habitual apoyo; evitemos la excesiva complacencia en los buenos momentos y no nos demos por vencidos en los difíciles. El campeonato es largo y el objetivo está claro. ¡Forza Ferrari!".
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